El material obtenido de la molienda se hace pasar por una malla o tamiz de 0,710 milímetros número 70, en este proceso se obtienen residuos que son mucho más gruesos que la harina, ellos forman parte de la sémola o lo que comúnmente se conoce como salvado, este residuo tiene una importancia en la alimentación de cerdos dado que es muy rico en nutrientes. En muchas ocasiones el tamizado se realiza con varios tamices dispuesto de forma descendente en cuanto al grosos de la malla desde el más grueso dispuesto arriba o en la parte superior hasta el más delgado dispuesto en la parte inferior, y se hacen vibrar mediante un sistema denominado RO-TAP que funciona de forma mecánica o eléctrica, dependiendo de la producción de harina, el productor puede conseguirlos de diferentes modelos en el mercado.